En la vida tenemos que enfrentarnos a muchos retos, y algunas veces nada fáciles: quedarnos sin casa, sufrir una enfermedad o un accidente, perder nuestro dinero, pasar por una dolorosa ruptura… nadie está al abrigo de las dificultades. No importa si los desafíos son grandes o pequeños, en cualquier ocasión tenemos la prueba a nuestro alcance. Podemos enfadarnos, enrabietarnos con nuestra mala suerte, deprimirnos y amargarnos sin límite o podemos tratar de aprender y sanar con ello, preguntándonos que puedo sacar de positivo de esta situación…
¿Cuántas personas obtienen gran sabiduría de sus enfermedades o de una relación que se ha terminado o de una trabajo del que les han echado? ¿Nos abrimos a aprender, a perdonar, a liberarnos de las ataduras del pasado, a cambiar tal y como la vida nos pide? ¿O nos aferramos a nuestra visión dentro de la caja? ¿Intentamos buscar «los regalos» de las situaciones negativas o nos hundimos en la miseria perpetuándolas hasta el infinito?
Como dice Neale Donald Walsh: «La perspectiva crea la percepción». Es decir, si nos vemos como víctimas, nos convertimos en una. Y ojo, la percepción crea la experiencia…
La renovación, la paciencia, el amor (hacia uno mismo y los demás) y el agradecimiento son capaces de obrar milagros. ¿Qué elección quieres tomar tú?
1 Response to "Cómo enfrentarse a los desafíos"
Mi eleccion:Aceptar lo que no puedo cambiar…loq no significa resignarme, no es asi Monica?
Me has recordado a algo quna vez escuche decir a Borges;Sostenia qlos matices, los detalles en las palabras a la hora de escribir,lo eran todo, y añadia:No es lo mismo decir la niña estaba sentada, que decir la niñita estaba sentadita…el tono, el matiz lo cambia todo, pues implica, cierto cariño, afecto, complicidad…
Gracias Monica por recordarme el valor de los matices,en las palabras y en la vida misma, hoy me he dado cuenta de mi propia ignorancia.Aceptar no es resignarse.Gracias por la leccion.
Un abrazo.