En esta meditación guiada para el perdón hacia uno mismo, te animamos a encontrar una posición cómoda y conectarte con un sentido de aceptación radical.
La meditación implica visualizar una luz curativa, que representa el amor incondicional, y dirigirla hacia una versión pasada de uno mismo. A medida que la luz penetra, disuelve la vergüenza y la culpa, reemplazándolas con autocompasión y aceptación.
La práctica concluye anclando esta luz transformadora de nuevo en el corazón, fomentando sensaciones de ligereza, felicidad y paz.